La ITE o Inspección Técnica de Edificios se lleva a cabo por parte de técnicos cualificados que permitan diagnosticar las diferentes patologías que afecten a una vivienda y, en su caso, proponer las reformas que se necesiten para su reparación.
Es obligatoria para todos aquellos edificios que tengan más de cincuenta años, con lo que se pretende prevenir futuros daños en la edificación.